Todo comenzó...

Hola, mundo, quien sea que este leyendo esto, hoy jueves 31 de octubre emprendí mi viaje a la CDMX desde la ciudad de Monterrey, Nuevo León.

Mi vuelo con salida marcada de 20 horas con 10 minutos estaba por salir y yo ansioso aborde con desesperación, el viaje, resulto ser bastante rápido, 1 hora con 10 min y aunque la situación no era tan estresante hubo tiempo para tomarse una cerveza en el avión, llegando a la CDMX sin mucha plata para un hotel decido ´pasar la noche en el aeropuerto, donde buscando desesperadamente un sillón para recostarse y dormir un rato no consigo mi cometido, triste y resignado decido dormir en unas gradas de concretos dentro del aeropuerto, la noche es fría y yo solo con un pequeño suéter apenas y logro conciliar el sueño, dan las 3 AM y después de medio dormir una media hora decido partir con rumbo a mi destino final.

Llego a la estación de autobuses dentro de las instalaciones del aeropuerto, donde para sorpresa mía, en este lugar se encontraban unas capsulas para dormir, vaya suerte la mía, decido ignorarlas y seguir mi camino hasta la terminal Pullman, donde en punto de las 4:30 AM sale mi camión con rumbo a la ciudad de Cuernavaca, 1 hora apenas y se tardo porque a las 5:50 AM yo ya me encontraba en Cuernavaca y con boleto en mano para dirigirme a la ciudad de Oaxtepec, donde ya muy amable la mamá de mi novia me esperaba.

A las 7:40 mas o menos arribaba a Oaxtepec, donde me recogió la mama de mi novia, muy atenta ella y muy amable me llevo hasta su casa, donde tras una larga noche al fin pude conciliar el sueño, y después de ese sueño reparador a las 11:30 un golpeteo se escucha en la puerta, al abrirla, veo a los ojitos mas hermosos que jamás había visto en mi vida, tapándose la mitad de la cara con un pequeño pato que decía, "bienvenido" un abrazo nos consumió en un instante y poco

a poco nos fuimos soltando, tanto que nos habíamos

hablado, tanto que habíamos preguntado, al fin frente a frente.

Con mucho por delante y con mucho miedo, nos recostamos en su cama, poco a poco fuimos hablando, fuimos platicando, entre abrazo y abrazo uno que otro beso se nos escapo, fue entonces cuando Liz me pregunto, ¿será correcto que nos besemos? fue ahí donde después de mucho miedo decidí tomar cartas en el asunto, yo no quería que Liz pensara que solo quería pasar el rato, o no ser mas que solo amigos, no, yo quería todo con ella, todo y esa era mi única intención, sin muchas opciones y con miedo de un rechazo, decido enfrentarlo, estos meses que nos hemos conocido han sido muy buenos, no quiero que malentiendas las cosas, yo quiero todo contigo, ¿Liz, quieres ser mi novia? en un beso nos apasionamos y dejando de lado cualquier prejuicio, nos enamoramos como solo nosotros sabemos.

Tras esta aventura, bajo a conocer a su familia, donde me presentan con su tia y su abue, maravillosas personas, la prima pequeña que casi no habla, no por que no quiera, si no por pena, ni me conoce, ella me presenta y almorzamos mole verde y pollo, para la noche, nos preparamos para salir, pues un amigo de ella nos ha invitado a salir de fiesta, sin embargo los planes van cambiando conforme pasa la noche, salimos en búsqueda de dulces, donde nos hacen cantar pedacitos de canciones que yo ni conocía, soy tan feliz por el simple hecho de estar ahí en ese momento con ella, la cacería de dulces termina, atascado estoy y no puedo mas, llegando a su casa nos comentan que el pueblo a donde iríamos de fiesta esta algo peligroso para salir tarde, así que cedemos la idea y comenzamos a tomar en su casa, donde conozco a manu, su mejor amigo, los tres recordando a nuestros seres queridos que ya no están con nosotros cantábamos canciones y gritábamos al ritmo de la música, yo que no estaba tan acostumbrado a la bebida, me siento bastante ebrio tras probar la bebida alcohólica Zacualpan, 4 vasos me bastaron para caer dormido hasta el otros día.

Fue un buen día, paso de todo pero siempre lo recordare porque fue el día que todo comenzó.